El primer mes del año 2020 nos ha pillado con las manos en la masa. El pasado martes 21 de enero Mobilitas junto con la Escuela Altaviana, donde se desarrolló la jornada, llevó a cabo un curso integral de panadería dirigido a alumnos y profesionales. El curso contenía dos partes diferenciadas: panadería y pastelería.
La experiencia de un profesional panadero
El encargado de impartir y dirigir el curso fue Torsten Burkhardt de la panadería alemana Backerie Backfreund. Mr. Burkhardt es colaborador directo de Mobilitas desde hace 5 años. Por ello, muchos de nuestros estudiantes viajan hasta su panadería en Alemania para realizar las prácticas profesionales acogidas dentro del programa Erasmus+.

Es más, en este momento una de nuestras estudiantes Erasmus+ del período 2018-2019, Valentina, forma parte de la plantilla activa de Backerie Backfreund. La joven aprendiz llegó a Alemania para desarrollar prácticas profesionales y terminó quedándose indefinidamente. Por otro lado, otra alumna de la Escuela Altaviana, Ana, se trasladará próximamente hasta esta misma panadería alemana para aprender al lado de los mejores.

Un curso con el pan como protagonista
La jornada comenzó con la inauguración del curso. El encargado de esta tarea fue Manuel Ribes, CEO de Mobilitas Training Projects. Primero realizó una presentación del mismo dirigida al personal docente y, más tarde, también para los alumnos.

En el curso integral de panadería participaron alumnas de primer y segundo curso de Grado Medio de Panadería y Repostería, además de profesoras del mismo Grado impartido en Altaviana. Las alumnas de segundo son las que más participaron ya que en las próximas semanas estarán en Alemania realizando sus prácticas profesionales.
Durante la mañana destacó la temática panadera y la importancia de trabajar la masa madre adecuadamente. Los panes que se elaboraron durante el curso fueron de diferentes tipos: hubo pan con harina de centeno, también de espelta, de harina de maíz y, por último, pan de aceite.
Pero, además del pan, también hubo hueco para la pastelería. La auténtica protagonista de este apartado fue la tarta Nussecken. Se trata de un pastel compuesto por masa brisa sobre la que se añaden otros toppings como mermelada de melocotón, una pasta de miel, mantequilla, azúcar, avellanas en polvo y molidas y nata. Una vez horneado el pastel es momento de cortarlo en triángulos y bañar sus extremos en chocolate. Esta tarea quedó a cargo de las mismas estudiantes. El Nusseken es una especialidad típica y muy fácil de encontrar en las pastelerías alemanas.
En el curso de panadería celebrado en la Escuela Altaviana también participó nuestra compañera Marta Catalá quien destacó la optimización del tiempo: “Me sorprendió mucho todo lo que se hizo en poco tiempo”.

El profesional panadero, con más de 30 años de experiencia en el sector, animó a las chicas a evolucionar experimentando y apostando siempre por la innovación, por lo desconocido. Mr. Burkhardt afirmó que la mejor experiencia es la que se adquiere al atreverse a probar cosas nuevas, adaptándose siempre a las necesidades y las demandas del momento y, por supuesto, del mercado. El experto panadero recalcó “Talent is nothing without work”, es decir, “El talento no es nada sin trabajo”.